Desde el Ministerio de Salud impulsan un programa que tiene como objetivo mejorar la calidad en el acceso a la salud de las personas en contexto de encierro, mediante el fortalecimiento de la atención en el acceso, la equidad y calidad, tanto de los servicios penitenciarios como las dependencias policiales.
La subsecretaria de Salud, Eliana Molina, se reunió con el referente del programa de Salud en contexto de Encierro, Marcelo Montero, la responsable del Programa de Diabetes, Cristina Du Plessis y de la División enfermería, Estela Maris Ruiz, con fin de profundizar estas políticas.
En la oportunidad, Molina comentó: “El Programa tiene como objetivo mejorar la calidad en el acceso a la salud de las personas en contexto de encierro, mediante el fortalecimiento de la atención en el acceso, la equidad y calidad, tanto de los servicios penitenciarios como las dependencias policiales. Para ello, es importante la coordinación de acciones con las diferentes áreas de Salud, tanto del PRIS, como de las direcciones generales, epidemiología, Salud Ambiental y fundamentalmente lo que es la articulación de las distintas áreas programáticas con el primer, segundo y el tercer nivel de atención”.
Actualmente, relató, se realizan encuentros interministeriales, interinstitucionales, una vez por mes, donde participa no solamente lo que es el Ministerio de Salud y el SIPROSA, sino también la Secretaría de Seguridad y Justicia, de Derechos Humanos, los delegados provinciales del Comité Nacional para la Prevención de la Tortura, la Secretaría de Educación, el Ministerio de Desarrollo Social, el área de deportes y de adicciones.
“Estos encuentros, buscan coordinar acciones en las distintas áreas, para poder mejorar la calidad de vida, implementando y fortaleciendo la estrategia de atención primaria de la salud que tiene un abordaje inclusivo, teniendo en cuenta el derecho de las personas y de las familias en lo que es promoción y prevención. En este esquema, se realiza vacunación a través de la brigada que concurre al servicio penitenciario y las dependencias policiales, acompañadas del referente en contexto de encierro”, indicó.
En tanto, la doctora Molina relató: “Se trabaja con la dirección de capacitación del SIPROSA con el personal del sector, en la gestión del suministro de insumos médicos que, a través del PRIS o de las áreas operativas, en la captación de distintas patologías y el seguimiento que es compartido. En ese marco, es de destacar la articulación de las distintas áreas de salud para permitir un abordaje integral y continuo de la persona privada de la libertad”.
Los operativos, precisó, cuentan con distintos registros que requiere el Ministerio de Salud para poder realizar un abordaje que sea integral y adecuado a la persona. Se registra lo que son los antecedentes, el examen físico, se realiza, si es necesario, el periodo de laboratorio y algún estudio complementario. Al realizarse mensualmente, permiten un seguimiento y se trabaja en forma coordinada y articulada con las otras áreas de los distintos ministerios para el abordaje de distintas situaciones de salud.
Es trascendental, concluyó, la figura del referente en contexto de encierro que maneja el programa, que en este caso ha sido designado el doctor Marcelo Monteros, quien se encarga de abordar con las diferentes áreas para permitir mejorar el acceso de las personas en lo que se refiere a la calidad de atención y al registro de los datos, además de la coordinación de turnos con los hospitales centrales, la gestión de turnos, el uso de la telemedicina, que actualmente es lo que se está desarrollando y trabajando con excelentes resultados.
Por su parte, el doctor Marcelo Montero indicó: “Durante la reunión se habló principalmente del Programa de Salud en Contexto de Encierro que es integral y se encarga del control de salud, prevención y tratamiento de las personas que están privadas de libertad, tanto en comisarías como unidades penales”.
La alternativa, explicó, tiene varias aristas, la primera son los operativos de salud donde se revisan a todos los detenidos en determinados lugares, se hace la clasificación de enfermedades, se incluyen los programas de tratamiento, se realiza análisis de HIV y campañas de vacunación. Después, están los dispositivos de emergencia en los cuales asistimos cuando hay una contingencia. Últimamente hicimos seis por casos de dengue confirmado en comisarías donde tuvimos que evaluar a todos, por las condiciones de alojamiento, clasificarlos, revisarlos y medicarlos.
“Acudimos por casos de psitacosis o enfermedades de la piel que sé que se desarrollan y transmiten rápidamente en el lugar del encierro. Asistimos con medicación a los que tienen enfermedades crónicas e infecciosas, además de equipos descartables, como bolsas de colostomía. Nos reunimos periódicamente con gente de seguridad, trabajamos en equipo con todo el SIPROSA y en casos puntuales, nos encargamos de coordinar los turnos para patologías especiales que nos solicitan desde distintos estamentos”, precisó.
Finalmente, destacó: “Tenemos la parte legal, en la cual recibimos múltiples citaciones u observaciones que pueden venir desde derechos humanos o de la justicia directamente, que solucionamos y contestamos a través de nuestros especialistas. Es una tarea ardua con una población difícil, vulnerable y desde el sistema tratamos en lo posible, de brindarle la mejor calidad en salud”.