En su primera reunión cara a cara con editores de alto nivel de agencias de noticias internacionales desde que estalló la guerra en Ucrania, Vladimir Putin profirió nuevas amenazas tras la noticia del uso de armas estadounidenses por parte de Kiev para atacar dentro de Rusia ante los duros ataques en Jarkov, a sólo 20 kilómetros (12 millas) de la frontera.
Situación a la que el ruso considera “escalada grave” ya que si los aliados continúan enviado armas a Kiev cada vez más poderosas para atacar a Moscú, serán arrastrados a una guerra total con Rusia.
Recordemos que tanto USA, como Reino Unido, Alemania y Francia autorizaron recientemente a Ucrania a atacar algunos objetivos en suelo ruso con armas de largo alcance.
El mandatario ruso aseguró que no solo derribará esos misiles occidentales, con clara referencia a los ATACMS estadounidenses (Biden aunque se los entregó a Kiev todavía prohíbe su uso), sino que desplegaría misiles similares de alta tecnología y largo alcance lo suficientemente cerca como para atacar a los estados que permitieron a Ucrania atacar territorio ruso con tales misiles, según supo Reuters.
“Nos reservamos el derecho de actuar de la misma manera. En general, este es un camino hacia problemas muy serios».
Vladimir Putin y Guerra nuclear
Si en un futuro cercano se desatara tal conflicto bélico entre Occidente y Rusia, posiblemente el conflicto sería atroz y nuclear, sería un paso hacia la Tercera Guerra Mundial. Putin volvió a advertir por el riesgo atómico.
Reivindicó la doctrina nuclear del Kremlin que contempla las condiciones bajo las cuales se permite el uso de armas nucleares:
Una respuesta a un ataque que utilice armas nucleares
Una respuesta a un ataque que utilice armas de destrucción masiva
Una respuesta a un ataque que utilice armas «cuando la existencia misma del Estado ruso se ve amenazada».
«Las armas existen para usarlas. Tenemos nuestros propios principios», aseguró.
Asimismo, manifestó que Occidente se equivoca al suponer que Rusia nunca usaría armas nucleares y la doctrina nuclear del Kremlin no debe tomarse a la ligera.
«Tenemos una doctrina nuclear, miren lo que dice. Si las acciones de alguien amenazan nuestra soberanía e integridad territorial, consideramos posible utilizar todos los medios a nuestra disposición. Esto no debe tomarse a la ligera, ni superficialmente».
Moscú, que tiene el mayor y más modernizado arsenal nuclear del mundo, ya desplegó armas nucleares tácticas en Bielorrusia en 2023 manteniendo el control total sobre ellas. En el último tiempo Putin se ha enfocado en la modernización de la tríada nuclear -misiles intercontinentales, submarinos atómicos y aviación estratégica- para mantener la paridad con USA.
Por su parte, USA se encuentra coordinando con países aliados la instalación de sus armas nucleares mediante el programa American Nuclear Sharing. Días atrás, Polonia se mostró dispuesta a albergar el arsenal nuclear de Estados Unidos en su territorio para reforzar la seguridad del flanco oriental de la OTAN. Hay 100 armas nucleares tácticas en Europa y Turquía. Las cargas que van de 0,3 a 50 kilotones para las bombas B61-3 y B61-4 están almacenadas en seis bases en Bélgica, Alemania, Italia, Países Bajos y Turquía.
En marzo el mandatario ruso anunció el despliegue de armas nucleares tácticas como parte de un ejercicio militar en respuesta a las provocaciones de Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos.
El uso de armas nucleares tácticas contra oponentes armados de manera similar puede significar un peligro de escalar el conflicto más allá de los límites previstos, de lo táctico a lo estratégico. Presenta el riesgo llegar a un punto de inflexión que provoque el uso de armas nucleares estratégicas como los misiles balísticos intercontinentales.
“Lawfare” contra Trump
Putin también en una pasaje breve durante la conferencia prensa se refirió a las situación caliente en Estados Unidos. Una de las campañas electorales más mediatizadas con un “delincuente convicto” como candidato republicano y un demócrata con su hijo polémico en el banquillo en un momento grave del país estremecedoramente agrietado.
En sintonía con los republicanos, opinó que lo estadounidenses están preocupados por su crisis interna más que por la guerra en Ucrania: «Nadie en Estados Unidos está interesado en Ucrania, están interesados en la grandeza de Estados Unidos, que no lucha por Ucrania y el pueblo ucraniano, sino por su propia grandeza».
Además, afirmó que el sistema judicial estadounidense claramente estaba siendo utilizado en una batalla política contra el candidato republicano Donald Trump.
«Se están quemando desde dentro, su Estado, su sistema político… Es obvio en todo el mundo que el procesamiento de Trump, especialmente en los tribunales por cargos que se formaron sobre la base de acontecimientos que ocurrieron hace años, sin prueba directa, es simplemente utilizar el sistema judicial en una lucha política interna».