Es la mayor ola de violencia registrada en Siria desde el derrocamiento del expresidente sirio, Bachar al Asad, el pasado 8 de diciembre. Los choques están teniendo lugar en las zonas mediterráneas de Siria, particularmente en la provincia de Latakia, núcleo de la minoría alauita.
Dos días de combates entre las fuerzas de seguridad de la nueva administración siria y grupos de la minoría alauita han provocado la muerte de casi 150 personas, en la mayor ola de violencia registrada en Siria desde el derrocamiento del expresidente sirio, Bachar al Asad, el pasado 8 de diciembre.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha asegurado este viernes que en dos días al menos 147 personas han muerto en choques directos en las zonas mediterráneas de Siria, particularmente en la provincia de Latakia, antiguo feudo de la familia Al Asad y núcleo de la minoría alauita, la rama del islam chií.
Los choques directos han matado a 37 miembros de las nuevas fuerzas de seguridad, 34 insurgentes alauitas y a siete civiles, de acuerdo con la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno.
Entre estos fallecidos se encuentra un trabajador de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), según ha informado en su cuenta de X el jefe de la organización, Philippe Lazzarini.
Ejecuciones a manos de las nuevas autoridades
El Observatorio también ha alertado de que otras 69 personas alauitas han sido ejecutadas, principalmente en las localidades de Al Hafa, Al Mojtareya y Al Sher de Latakia, unos ajusticiamientos que han sido efectuados por las fuerzas de seguridad pertenecientes a la nueva administración de Damasco.
Combates en Latakia (Siria). Foto: EFE
Estos enfrentamientos han despertado también temores a un nuevo conflicto sectario en un momento en el que las autoridades de Damasco están tratando de dar una imagen de unidad entre las diferentes etnias y confesiones que conviven en Siria.
La agencia oficial de noticias siria SANA ya informó ayer que seis hospitales en Latakia y en Tartús, también en la costa mediterránea, fueron objeto de «ataques directos y asaltos por parte de los remanentes del antiguo régimen», mientras que grupos de activistas denunciaron que los grupos armados también apuntaron contra ambulancias y manifestantes pacíficos.
Toque de queda en Latakia y Tartús
Las autoridades han extendido hasta mañana, sábado, el toque de queda en las provincias costeras de Latakia y Tartús, mientras que los combates siguen en algunas localidades en las que estos grupos se han hecho fuertes.
Según el Observatorio, las fuerzas de seguridad ya han recuperado el control de localidades clave como Banyias y casi la totalidad de Jableh, mientras que los combatientes alauitas «siguen desplegados en varias ciudades y pueblos de las montañas costeras sirias«.
Las fuerzas sirias lanzaron hace tres días una operación en Latakia después de que elementos supuestamente leales a Al Asad matasen a dos efectivos en una emboscada, según SANA, en un momento en el que las nuevas autoridades están efectuando amplios operativos contra miembros del antiguo régimen.