Rusia anunció ejercicios nucleares ante la «amenaza» de Occidente

Rusia anunció el lunes que va a llevar a cabo «en un futuro próximo» ejercicios nucleares cerca de Ucrania y dijo que su ejército podría atacar equipos militares británicos en ese país, en respuesta a las declaraciones de dirigentes de potencias occidentales sobre un posible envío de soldados. Desde el inicio del conflicto en Ucrania, en febrero de 2022, el presidente ruso Vladimir Putin puso varias veces sobre la mesa la posibilidad de recurrir a las armas nucleares.

El ministerio de Defensa ruso anunció en un comunicado la organización de ejercicios «para entrenarse en la preparación y uso de armas nucleares no estratégicas», que pueden ser utilizadas en el campo de batalla y ser disparadas sobre misiles. El Kremlin afirmó que estos ejercicios son una respuesta a las «amenazas» de dirigentes de las potencias occidentales sobre la posibilidad de enviar tropas a Ucrania.

El vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, denunció que se hable de la «intención de enviar contingentes armados en Ucrania, es decir de colocar a soldados de la OTAN frente a las fuerzas armadas rusas». Peskov señaló al presidente francés, Emmanuel Macron, cuya retórica calificó de «muy peligrosa». La semana pasada Macron reiteró su postura sobre un posible envío de tropas a Ucrania «si los rusos rompieran las líneas del frente, si hubiera un pedido ucraniano».

Ataques a objetivos británicos

El anuncio sobre los ejercicios con armas nucleares es «un ejemplo del tipo de retórica irresponsable que hemos visto por parte de Rusia en el pasado», reaccionó Estados Unidos. «Es completamente inapropiada dada la actual situación de seguridad», dijo a los periodistas el portavoz del Pentágono, Pat Ryder, agregando que no se observó «ningún cambio en el posicionamiento de fuerzas estratégicas» pero seguirán «vigilando».

La primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, dijo en una rueda de prensa tras recibir en Riga junto a sus homólogas de Letonia y Lituania al canciller alemán, Olaf Scholz, que las declaraciones del gobierno ruso no son nada nuevo y «se hicieron para hacernos cuestionar nuestras decisiones» de apoyar a Ucrania. Los ejercicios rusos incluirán la aviación, la marina y las fuerzas del Distrito Militar Sur, que tiene su sede muy cerca de Ucrania y cubre las regiones ucranianas cuya anexión reivindica Moscú. La fecha y el lugar de los ejercicios no fue especificada.

La doctrina nuclear rusa prevé el uso «estrictamente defensivo» del arma nuclear en caso de ataque a Rusia con armas de destrucción masiva o en caso de agresión con armas convencionales «que amenacen la existencia del Estado». El ministerio ruso de Exteriores advirtió que la pronta llegada de los cazas F-16 a Ucrania será vista como una provocación de Estados Unidos y la OTAN. Moscú destacó que durante años ese tipo de aviones fue utilizado en las «misiones nucleares conjuntas» de la alianza atlántica.

Rusia también amenazó el lunes con atacar objetivos británicos en Ucrania «y más allá» en el caso de que Kiev emplee armas suministradas por Reino Unido contra su territorio. La diplomacia rusa indicó que el embajador británico Nigel Casey fue convocado luego de unas declaraciones del canciller británico David Cameron que, según Moscú, aludían al «derecho de Ucrania de golpear el territorio de Rusia utilizando armas británicas».

Siete muertos cerca de Bélgorod

En el campo de batalla el ejército ruso reivindicó la toma de otras dos localidades en el este y el nordeste de Ucrania, donde las tropas de Moscú registraron varios avances en los últimos meses. El ministerio de Defensa ruso informó que sus soldados liberaron las localidades de Kotliarivka, en el nordeste, y de Soloviove, en la región de Donetsk, en el este, cerca del pueblo de Ocherétine, cuya toma Moscú reivindicó el domingo.

Rusia está a la ofensiva desde el fracaso del gran contraataque lanzado por Ucrania a mediados de 2023, beneficiada por el desgaste del ejército de Kiev, que tiene dificultades para reclutar nuevos soldados para repeler la invasión que empezó en febrero de 2022. Por otra parte, al menos seis personas murieron y 35 resultaron heridas en un bombardeo ucraniano con drones en la región rusa de Bélgorod, donde los ataques de las fuerzas de Kiev son habituales según su gobernador, Viacheslav Gladkov.