El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo este jueves 7 de agosto que su reunión con el presidente Donald Trump podría ser organizada por Emiratos Árabes Unidos. Aunque el lugar de la reunión no ha sido confirmado, un oficial del Kremlin sugirió que la cita podría tener lugar tan pronto como la semana próxima.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo este jueves 7 de agosto que su eventual reunión con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría celebrarse en los Emiratos Árabes Unidos (EAU). Putin hizo esta declaración en el Kremlin tras una reunión con Sheikh Mohammed bin Zayed Al Nahyan, presidente de los EAU. Tanto Estados Unidos como Rusia mantienen buenas relaciones con el país de la península de Arabia.
“Tenemos muchos amigos que están dispuestos a ayudarnos a organizar este tipo de eventos. Uno de ellos es el presidente de los Emiratos Árabes Unidos”, afirmó Putin junto a Mohamed bin Zayed Al Nahyan, de visita en Moscú. Un funcionario del Kremlin dijo previamente que la reunión entre Trump y Putin podría tener lugar la próxima semana, aunque aún no se ha confirmado la fecha.
El anuncio del encuentro llegó tras la sorpresiva visita a Moscú del enviado de Trump para Medio Oriente, Steve Witkoff, quien el miércoles sostuvo una reunión de tres horas con Putin. Horas después, el asesor de asuntos exteriores de Putin, Yuri Ushakov, afirmó que la cumbre podría celebrarse la próxima semana en un lugar que ya se ha decidido «en principio».
El miércoles, Trump explicó a la prensa reunida en la Casa Blanca que un acuerdo para alcanzar el fin de la guerra en Ucrania estaba cada vez más cerca: «Tuvimos muy buenas conversaciones con el presidente Putin hoy y hay muchas posibilidades de que podamos cerrar la ronda, el final de la guerra. Hay muchas posibilidades de que haya una reunión muy pronto», afirmó.
La reunión entre ambos mandatarios —que será la primera desde que Trump ganó las elecciones presidenciales de noviembre pasado— se enmarca en un contexto de tensión por la guerra entre Rusia y Ucrania. Trump prometió durante la campaña poner fin al conflicto en 24 horas, pero desde que asumió la presidencia, Rusia ha dado largas a un posible acuerdo para el fin de los combates, mientras gana terreno de manera progresiva desde enero sobre el este de Ucrania.
Ante la presión, Trump también ha ido alternando su postura sobre Rusia: En ocasiones ha puesto de manifiesto su descontento con Putin, denunciado que el líder ruso “está matando a mucha gente”, y más recientemente ha incrementado su campaña de presión con la amenaza de imponer sanciones económicas más severas a Moscú si no facilita a un acuerdo con Kiev.
El presidente estadounidense no solo está ejerciendo presión sobre Rusia, sino también sobre sus aliados: esta semana anunció la imposición de aranceles de 50% a productos de la India como castigo por la compra de crudo ruso. De momento no está claro cómo el anuncio de la reunión afectaría el plazo hasta el viernes que Trump dio a Rusia para detener los ataques o enfrentarse a fuertes sanciones económicas.