Miles de fieles despiden al papa Francisco, mientras el Vaticano prepara todo para el cónclave

Más de 20 000 fieles han pasado este miércoles ante el féretro del papa Francisco en la basílica de San Pedro del Vaticano, en el primero de los tres días de exposición hasta su funeral el próximo sábado.

El féretro del papa Francisco, fallecido el 21 de abril a los 88 años, ha quedado expuesto este miércoles en el Altar de la Confesión de la Basílica de San Pedro para que las y los fieles puedan darle el último adiós. La capilla ardiente ha abierto sus puertas al gran público a las 11:00 horas, una vez finalizadas las liturgias.

Ya desde primeras horas de la mañana se han formado largas colas en espera de que se abriese la basílica. Según la Santa Sede, unas 20 000 personas se han dado cita en la plaza San Pedro para seguir estos primeros compases de la despedida al sumo pontífice.

El féretro ha sido colocado frente a la tumba de San Pedro, enfrente del imponente baldaquino de Bernini, y se ha acordonado la zona para que las personas se sitúen a una determinada distancia.

La capilla ardiente permanecerá abierta hasta el viernes a la tarde en la basílica de San Pedro. El horario de cierre este miércoles será a medianoche; de 07:00 a 00:00, el jueves, y entre las 07:00 y las 19:00 horas, el viernes. Tras su clausura, se procederá a realizar el rito del cierre del féretro, previo al funeral.

El cuerpo del sumo pontífice ha sido trasladado esta mañana desde la capilla de la residencia de Santa Marta. La procesión ha comenzado después del momento de oración, presidida por el camarlengo de la Santa Iglesia Romana, actualmente el cardenal Kevin Joseph Farrell. La comitiva ha pasado por la Plaza de Santa Marta y la Plaza de San Pedro, en el Vaticano. Desde el Arco de las Campanas ha salido a la Plaza de San Pedro y ha entrado en la Basílica Vaticana por la puerta central.


Gran presencia internacional en el funeral

Los funerales serán el sábado 26 de abril a las 10:00 horas en la plaza de San Pedro y estarán oficiadas por el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re. A la ceremonia acudirán jefes de Estado de todo el mundo.

Así, la UE estará representada por las presidentas de la Comisión Europea, del Consejo Europeo y de la Eurocámara, Ursula von der Leyen, António Costa y Roberta Metsola. También han confirmado su presencia el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y las vicepresidentas del Gobierno español María Jesús Montero y Yolanda Díaz; el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo así como Felipe VI, como jefe de Estado —Sánchez no irá—. Los primeros ministros Reino Unido, Bélgica y Luxemburgo, respectivamente, Keir Starmer, Bart De Wever y Luc Frieden también han confirmado su presencia. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, fue de los primeros en confirmar que viajará a Roma.

Entre los líderes americanos, irán el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, así como sus homólogo de Argentina y Brasil, Javier Milei y Luiz Inácio Lula da Silva, respectivamente. Chile o México también enviarán delegaciones, aunque no se espera la presencia de sus líderes.

El secretario general de la ONU, António Guterres, viajará el sábado a Roma para el funeral y posterior entierro del papa.

Por el contrario, el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, no asistirá al funeral.

Tal como decidió el propio Francisco, las exequias serán más sencillas. El papa Francisco simplificó el año pasado la tradición de los tres ataúdes, el catafalco, el báculo papal o los tratamientos más allá de obispo y papa. Además, el papa ya adelantó que deseaba ser enterrado en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, no en la basílica de San Pedro.