El futuro presidente republicano asumirá el 20/1/25 por lo que quedan menos de 2 meses para el intento de los migrantes ya que se endurecerían los controles.
En ciudades mexicanas fronterizas como Tijuana, Nogales, Calèxico y Ciudad Juárez no paran de agolparse migrantes latinoamericanos, africanos, asiáticos y hasta europeos que pretenden vulnerar la Frontera Sur de la súper potencia antes que llegue Donald Trump a la Casa Blanca.
Todavía no alcanzaron la masividad de 2018, antes de la primera gestión del magnate neoyorquino, pero se suman caminantes ante la inminencia de la fecha lìmite.
Algunos buscan frenéticamente lograr entrevistas para un acceso legal pero en algunos casos llevan un año de espera y no son convocados.
La aplicación de citas por internet llamada CBPOne permitió que 1 millón de personas ingresaran a territorio estadounidense desde enero de 2023 para solicitar asilo. Se concedieron en estos casi dos años de sistema cerca de 1.500 convocatorias diarias.
Los conservadores aprovecharon esta situación para denunciar durante la campaña presidencial una “invasión” legalizada por la actual administración de los demócratas. Ahora, las familias deben esperar durante semanas enteras hasta ser convocados para las entrevistas y eso las expone a todo tipo de delitos: robos, secuestros, trata de personas y abusos sexuales.
Las columnas humanas parte desde el Sur de Mèxico
Las caravanas se inician en localidades como Tapachula (Chiapas), ya que muchos de los caminantes provienen de Centro América y Venezuela. Trump prometió durante la campaña electoral no solamente frenar las llegadas sino también iniciar un inédito proceso de deportaciones masivas para los 12 millones de residentes ilegales que viven y trabajan en la Unión de manera irregular.
fuente:urgente24