El patio del Museo Sanmartiniano de Tucumán fue el epicentro de las actividades al conmemorarse 174 años del paso a la inmortalidad del prócer argentino. Su paso por el entonces paraje, donde pasó cerca de un mes curándose de una dolencia en el pecho.
El gobernador Osvaldo Jaldo encabezó esta mañana en el patio del Museo Sanmartiniano de Tucumán, ubicado en la Ramada de Abajo (a 35 kilómetros al noreste de la Capital tucumana) el acto central al conmemorarse el 174° del paso a la inmortalidad del General Don José Francisco de San Martín.
Acompañaron al Primer Mandatario el vicepresidente 1° de la Legislatura, Aldo Salomón, los ministros Eugenio Agüero Gamboa (Seguridad), Luis Medina Ruiz (Salud), Susana Montaldo (Educación), el secretario General de la Gobernación, Federico Nazur, la intendenta capitalina Rossana Chahla, su par de Burruyacú, Jorge Leal, el comisionado de La Ramada y la Cruz, Camilo Isa Morel, el presidente del Ente de Cultura, Humberto Salazar, el titular del Ente Tucumán Turismo, Domingo Amaya, el encargado del museo Sanmartiniano, Martín Ruiz Torres, el legislador Walter Herrera, autoridades policiales de la Unidad Regional Este de la fuerza provincial, representantes de Gendarmería Nacional y otros funcionarios, establecimientos escolares, concejales y comisionados comunales.
«Queriamos rendir un homenaje a este gran hombre, a este gran procer como fue el general San Martín al cumplirse los 174° años del paso a la inmortalidad y agradezco al delegado comunal (Isa Morel) y a los vecinos por mantener a este Museo en perfectas condiciones», señaló Jaldo.
De dónde venimos
El Gobernador aseguró en su discurso: «Tenemos que saber de dónde venimos para no equivocarnos a donde vamos, por eso valoramos la tarea de la docencia, de los padres que inculcan el sentido patriótico a los niños y jóvenes, que siempre deben saber la historia de nuestra argentina, es la única manera de seguir defendiendo los ideales de nuestros próceres, de nuestros héroes para que nosotros podamos disfrutar de esta bendita patria.
Por tal motivo agradeció «a todos y todas los que colaboraron para que hoy podamos homenajear al general San Martín, que desde muy joven entró a la carrera militar, luego paso por Londres y después se incorporó al Ejército para acompañar esa campaña de liberación no solo de argentino sino también de Perú y Chile».
«Hoy pueblo y gobierno estamos aca para rendir un homenaje al General San Martín, pero quiero agradecer fundamentalmente a quien estando ocupando el cargo de comisionado comunal siempre se preocupó y ocupó de mantener viva la historia del General Jose de San Martin y mantener este lugar donde le toco descansar, gracias comisionado Isa Moral, muchas felicitaciones», agradeció Jaldo.
Siguiendo con su relato histórico, Jaldo contó que cuando «San Martin se recuperaba aquí (en La Ramada) de pequeños problemas de salud, planificó el cruce a la cordillera de los Andes y miren lo que significó esa decisión del general cruzar los Andes a caballo y mula con un ejército que venía de sufrir y tener pérdidas en varias batallas».
Además, el titular del Ejecutivo dijo en su discurso que «es momento de asumir compromiso con nuestra patria, de defenderla, de dejar las diferencias políticas personales que nos dividen y que dividen el esfuerzo de nuestros próceres. Hoy como gobernador de la provincia, que llevamos tan solo 9 meses, agradecerle el acompañamiento a la intendenta Rossana Chahla, tenemos que seguir todos juntos trabajando para seguir consolidando los ideales y principios de nuestros próceres y héroes.
El gobernador elogió a los abanderados y escoltas de las escuelas presentes pero también en su discurso tuvo un párrafo aparte para el rol que desempeñan los maestros y maestras en las aulas, «no solo educando sino poniendo el oido escuchando la problemática que tienen los niños», aseguró.
Por su parte la intendenta Chahla agradeció al gobernador y al delegado comunal haberla permitido compartir este día tan especial donde una vez más se plasmó esta «Argentina libre, soberana y democrática», aseguró la jefa municipal capitalina.
“Aquí pudimos reconstruir esta historio y sobre todo cuanto nos costo reconstruir todo esto y es importante que nuestros chicos en su memoria lo lleven para siempre” y elogió e libro que entre el ministerio de Educación y el delegado comunal plasmaron esta historia.
“Como tucumanos tenemos que conocer nuestra historia y a todos llegarse a la Ramada para conocer nuestra historia en esta comuna napoleónica”, manifestó Chahla.
Construir identidad
Mientra tanto, la ministra Montaldo expresó: «Conocer nuestra historia es construir identidad y el General San Martin cuando escribio para su hija Merceditas también son máximas para la provincia para formar en valores, amar la verdad y también recordamos quiso terminar sus días en Mendoza por el desencuentro entre los argentinos»
En consonancia con sus palabras agregó: «Espero que este lugar historico tambien sea historia para lo que quería San Martin un país consolidado, plural, solidario y equitativo», auguró.
A su turno, el presidente del Ente de Cultura, calificó de «un hermoso acto para honrar el legado de San Martin que excede lo militar, donde instruyó a sus soldados en otros ámbitos como la cultura, la geometría y las matemáticas».
Orgullo
El delegado Morel (muy elogiado por el propio gobernador por mantener en un excelente estado el Museo) dijoi: «Estamos muy emocionados porque nos visitó no solo el Gobernador sino gran parte de todo el equipo de este gobierno y la intendenta» y agregó: «Que haya estado el general San Martín en La Ramada es un orgullo muy grande y cada año ponemos nuestro granito de arena para transmitir al pueblo el mensaje del prócer», cerró.
Un poco de historia
Una enfermedad en el pecho que comenzó a fines de marzo de 1814 del entonces jefe del Ejército del Norte, José de San Martín, obligó a este a trasladarse a una hacienda tucumana por recomendación médica hasta mejorar y luego a Córdoba, en busca de un mejor clima.
“El lugar elegido fue La Ramada, una finca ubicado al nordeste de la provincia, en el actual departamento de Burruyacú. Su propietario era, por entonces, don Pedro Bernabé Gramajo, casado con doña Dolores Molina. La hacienda, cuya extensión era de unas mil trescientas hectáreas, había pertenecido antes a doña Escolástica Aráoz, hermana del cura Pedro Miguel Aráoz, futuro congresal de la Independencia. Se la había vendido a don Pedro en 1806”, reza un artículo de Carlos Páez de la Torre (h) publicado en el diario La Gaceta.
“Es decir que la estadía del futuro Libertador en La Ramada de Abajo, se extendió desde el 28 de abril hasta el 24 de mayo. O sea, duró casi un mes. No se registran constancias documentales de su actividad allí. Puede conjeturarse que se haya limitado a alternar el descanso con tareas de lectura y escritura de cartas, más algunos cortos paseos por las inmediaciones. Con frecuencia llegaba hasta La Ramada, para informar y para recibir instrucciones, el coronel Fernández de la Cruz”, reseñó el historiador.
La Ramada de Abajo fue declarada “monumento histórico provincial”, el 14 de agosto de 1976. Décadas después fue declarado Lugar Histórico Nacional. El antiguo solar fue inaugurado en 2010 con salas que contienen material audiovisual, libros, iconografía sanmartiniana, un cuadro que recrea, a través de la línea del tiempo, los hechos cruciales de su vida y una réplica del sable corvo que el Padre de la Patria utilizó en las batallas de la Independencia.