Al menos 42 soldados sirios y combatientes del movimiento libanés Hezbollah murieron en un ataque israelí el viernes de madrugada en la región de Aleppo, en el norte del país, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). La organización, con sede en Reino Unido y una amplia red de fuentes en Siria, señaló que el ataque tenía como objetivo «depósitos de misiles de Hezbollah», aliado del régimen sirio, del movimiento islamista palestino Hamas y de Irán, archienemigo regional de Israel.
Es el saldo más mortífero entre las filas del ejército sirio por un ataque israelí desde que en octubre comenzó la guerra en la Franja de Gaza entre el Estado hebreo y Hamas, según esta organización.
Desde que arrancó este conflicto, Hezbollah, en solidaridad con el Hamas palestino, ha atacado casi a diario objetivos en el norte de Israel desde el sur de Líbano.
Israel ha respondido a esos ataques de Hezbollah, golpeando blancos en territorio libanés cada vez en más profundidad, los últimos a más de 100 km de la frontera.
En paralelo, el ejército israelí ha intensificado desde octubre sus ataques a elementos proiraníes en Siria, un país en el que ha atacado a numerosos objetivos desde que en 2011 empezara allí la guerra civil.
A mediados de este mes, el ejército israelí anunció que había atacado «alrededor de 4.500 objetivos de Hezbollah» en Líbano y Siria desde el estallido de la guerra con Hamás en Gaza.