El Senado repudió la privatización de Radio Nacional

Quizás fue un efecto de la bronca que se expresa en Misiones, quizás fue consecuencia de las cuentas propias o la vista de la situación de cada vez más personas que no pueden cubrir sus necesidades básicas, el Senado de Salta tuvo ayer una sesión crispada en la que se reiteraron las críticas al gobierno nacional por la retención de fondos y la paralización de obras públicas.

En ese marco, la Cámara alta aprobó por unamidad un repudio a la pretensión de privatizar los medios públicos, particularmente la red de Radio Nacional, que tiene presencia en todo el territorio nacional y que en Salta cuenta con dos emisoras, Radio Nacional Salta y Radio Nacional Tartagal.

El encargado de presentar el proyecto, el senador Miguel Calabró, subrayó que el Senado ve con mucha preocupación el cierre de oficinas del Estado nacional y denunció que el gobierno nacional lleva a cabo un plan de vaciamiento de las agencias estatales.

En cuanto a la radio pública, destacó la función que tiene este medio, cuya señal llega a los lugares más recónditos de la provincia. Calabró subrayó que estas radios cubren lugares a donde la iniciativa privada no tiene interés de llegar, porque no representan un negocio. “Nadie va a agarrar una radio como la Radio Nacional Tartagal”, que pasa mensajes de pobladores, por ejemplo, tan importantes para esa población. “Pero esto a los Milei, a los Caputo, no les interesa”, cuestionó.

Asimismo, el legislador alertó que es posible que detrás de la pretensión de cerrar la red de radios públicas «haya algún negocio inmobiliario en el medio, porque Radio Nacional tiene, en todas las provincias, terrenos de mucho valor”. Las dos emisoras de la provincia tienen amplios priedos, donde se encuentran sus estudios y sus plantas transmisoras. En el caso de Radio Nacional Salta, ubicada, frente a la Sociedad Rural, está en «un predio de un valor altísimo”, aseguró Calabró antes de confirmar que el lunes próximo asistirá a la radio abierta y abrazo simbólico que se hará a la emisora, entre las 12 y las 14.

“Quiero que sepan que aquellos países a los que admira el Presidente y todo su equipo, tienen radios públicos” y “con una fuerte inversión y con los mejores periodistas, y nosotros también podemos vanagloriarnos de eso. Hasta hoy”, siguió Calabró.

El senador Javier Mónico, lamentó el comunicado por el que el gobierno nacional informó sobre el cierre de las páginas digitales de las radios públicas: “los medios públicos se encuentran en un proceso de reorganización”, afirmó el gobierno. “Creo que ni siquiera han sido felices las expresiones que se han utilizado, ya que han utilizado términos que claramente nos recuerdan a los tiempos más oscuros de nuestro país”, aseguró Mónico.

Asimismo, destacó que en estos tiempos, en que “la comunicación y el acceso a la información son determinantes», no se puede dejar en la nada «la necesaria comunicación que debe realizar el Estado nacional, de políticas públicas, porque hacen al interés nacional. Claramente estos medios cumplen una función trascendente en nuestra sociedad y estratégica desde el punto de vista del estado», ratificó.

Un pacto para defender la provincia

La crisis atravesó toda la sesión del Senado, al punto tal que casi todos los temas tratados tuvieron en común su vinculación con las medidas de ajuste que lleva adelante el gobierno de Javier Milei. En este marco, los legisladores de la Puna dieron su apoyo al Pacto de Güemes convocado por el gobernador Gustavo Sáenz y convocaron a salir «a defender lo que nos corresponde».

El senador de La Poma, Dani Nolasco, tras un amargo repaso por la situación en su departamento, con caminos rotos, el aumento del gas envasado (el único al que se puede acceder en esa zona), la suba en el transporte público, el cierre de fuentes de trabajo, la falta de financiamiento para la salud y la educación, convocó a salir a las calles a reclamar por los fondos que la Nación retiene.

Al celebrar la convocatoria del gobernador, el legislador recordó que Martín Miguel de Güemes peleó para que pudiera haber derechos, gozar “de nuestra voz para decir que estamos mal, hasta acá llegamos y cuáles van a ser nuestros pasos a seguir”.

Nolasco invitó a los 23 departamentos a sumarse, porque “es momento de tomarnos de la mano, como hermanos esta lucha». Ojalá que el 17 de junio «digamos hasta acá llegamos, y de acá en más nosotros seremos los que vamos a salir a pelear y seguramente a la calle porque ya no queda otra de salir a lucharla y pelearla en la calle”, aseguró.

Antes en el repaso de las obras nacionales paralizadas en su departamento, había reclamado: “El gobierno nacional tiene que tomar el toro por las astas y dar una solución”. Destacó que el ajuste de la Nación provoca mucho sufrimiento a la gente. Por eso deseó que el Presidente “vea, revea las cosas que está haciendo, que no están buenas, está golpeando muy duro al que menos tiene, al que menos puede».

También el senador por San Antonio de los Cobres Leopoldo Salva dio su apoyo al convocado por el gobernador. «Los salteños debemos manifestarnos desde esta discriminación que sentimos, no puede ser que nazcamos en el mismo país, pero pareciera que nacimos en otro. Vivimos en el mismo país, pero acá en el interior profundo parece que vivimos en otro». Por eso «tenemos que salir a manifestarnos”, sostuvo. Y convocó también a defender la obra pública, “a defender lo que nos corresponde”. 

Salva también pidió a legisladoras y legisladores nacionales “que analicen bien» antes de aprobar el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) porque afectará a las pequeñas empresas de la provincia, como las que «hoy están surgiendo (en la Puna, al calor de la minería) que no van a poder competir con estas grandes inversiones”.

Walter Cruz, del departamento Iruya, repasó algunas de las obras públicas paralizadas por la Nación en la provincia y tambén celebró la convocatoria al Pacto. Recordó que en su momento le parecía que el gobernador «le estaba pidiendo peras al olmos, tratando de escuchar a un Presidente que no escucha a nadie», que «quiere imponer y para él eso es democracia. Que quiere hacer lo que él quiere y eso es libertad”. En contraposición, dijo que en la provincia este pacto se hará «sin aprietes», «no vamos a apretar, ni a cambio de nada, como lo están haciendo ahora con la Ley Bases”, y tampoco se llama a un pacto que después no se va a hacer, como está ocurriendo ahora con el Pacto de Mayo. “Vamos a demostrarle al gobierno nacional que somos más serios”, aseguró.

Decisiones inconsultas desde Buenos Aires

La senadora por Anta, Alejandra Navarro, contó que supo que el gobierno nacional está decidiendo cuáles son las obras prioritarias en Salta. «La Nación envía a la provincia un orden de prioridades de obras», de las 2.300 que la Nación ejecutaba en territorio salteño.

La legisladora dijo que le llama la atención «que desde Buenos Aires envían, con la numeración del uno al 8, las prioridades. Las prioridades para nosotros en la provincia, o sea que desde Buenos Aires nos dicen cuáles es el orden de prioridades de nuestras obras”, se asombró. Y dijo que entiende que en Buenos Aires no comprendan la importancia de ciertas obras. “No lo entienden porque no lo conocen, no conocen el interior del país”, sostuvo.

Navarro también adhirio al Pacto de Güemes, entendiendo la situación económica «muy delicada» que está pasando la provincia. Y entendiendo «esfuerzo que está realizando la provincia para poder tratar de subsanar las situaciones que se nos están presentando por la desfinanciación desde Nación”.

Antes el senador Esteban D’Abdrea, del departamento Chicoana, que en la sesión pujó para que se aprobara una declaración pidiendo que se congele el precio de la garrafa de gas envasado, adhirió al Pacto. “Es un mandato que hoy nos pide la gente”, que pide soluciones, sostuvo. Sobre la garrafa, indicó que el 60% de la población de Salta usa gas envasado.