La iniciativa es impulsada para dialogar con las personas y trabajar por el cuidado de la Salud Mental y la prevención.
Se trata de un innovador método para captar a los transeúntes y conocer cómo se sienten, iniciativa que forma parte del cuidado de la Salud Mental y la prevención.
El ministro de Salud Pública, Luis Medina Ruiz, visitó el stand de Salud Mental en la entrada de Casa de Gobierno y sobre esto comentó: “Hemos dispuesto un stand de Salud Mental con un llamativo ‘emocionómetro’ que mide como me siento, incluso hay una ruleta que si se hace circular la aguja explica que hacer cuando uno se siente triste o alegre. En mi recorrido personal por la Casa de Gobierno vi que personal de la misma y también chicos de la escuela, pasaron por el stand y pudimos brindarle algunos consejos, la idea es tratar la salud mental desde la atención primaria”
Y añadió: “Este stand está diseñado por psicólogas y personal del de área Sudeste pertenecientes a la atención primaria específicamente de CAPS y policlínicas donde tenemos que detectar los problemas de salud mental al inicio e incluso actuar preventivamente. Con métodos sencillos se puede interpelar con los niños y saber cómo se sienten y recordarles que tienen una familia que los quiere y hacerlos sentir bien”.
“El mensaje que queremos dar es que todos tenemos algo para levantarnos cada mañana, alguien o algo por que vivir. Esa es una consigna que si no la tenemos clara debemos cuestionarnos y buscar el motivo”, enfatizó.
Por su parte, Silvina Lorenzetti, referente de Salud Mental del área operativa Sudeste, expresó: “Nuestro objetivo es enseñarles a niños y adultos a expresar las emociones, primero a identificarlas y así gestionarlas; de esta forma alcanzamos comportamientos más constructivos y no destructivos, es decir que nuestro mensaje es poder transmitir todas las emociones que son valiosas e importantes”.
Y agregó: “Para ello usamos la consigna de la película ‘Intensamente’ e hicimos un emocionómetro, donde invitamos a la gente a que nos cuente cómo se sienten el día de hoy, eso nos parece muy importante y creemos que la salud mental tiene que ver justamente con equilibrio entre las emociones”.
“Hicimos una ruleta donde están todas las emociones de intensamente, el niño, adolescente o adulto, gira la ruleta y la emoción que le sale la mira a través de un antifaz para despersonalizarlo y caracterizar cómo es él o ella cuando está invadida por esa emoción”, explicó.
“Por ejemplo si está furioso, les sale furia y la idea es que nos cuenten cómo gestionan esa emoción. Luego hay un segundo paso donde la persona se para frente al emocionómetro y ahí lo hacemos más personal y le preguntamos cómo se siente el día de hoy, cuál es tu nombre y con un brochecito queda plasmado en el emocionómetro como son sus emociones y con cual se siente más identificado”, finalizó.