En junio, la venta de combustibles experimentó una significativa caída del 12,05%, según los datos proporcionados por la Secretaría de Energía. En total, se despacharon 1.313.239 metros cúbicos de combustible, siendo la nafta premium el segmento más afectado, con una disminución del 20,61%.
Las ventas en junio fueron dominadas por las naftas, que representaron el 61,4% del total de combustibles vendidos, en contraste con el 38,6% correspondiente al gasoil. La caída en la venta de nafta premium resalta una tendencia preocupante para el sector, que ya acumula siete meses consecutivos de descenso.
El impacto de esta disminución se siente con especial fuerza en las provincias limítrofes con otros países, donde la venta de combustibles se desplomó hasta un 34%. Este descenso es notablemente superior a la media nacional, indicando que las zonas fronterizas enfrentan desafíos particulares en cuanto al consumo de combustibles.
Además de la nafta premium, la categoría de nafta súper también experimentó una caída, aunque menor, del 6,27%. Esto sugiere que algunos consumidores optaron por cambiar a una calidad inferior de combustible.
Por otro lado, el gasoil común registró una disminución del 16,72% en los últimos 12 meses, mientras que el gasoil premium cayó un 9,04%.
Nafta súper: las ventas cayeron 6,27%.
Nafta premium: el consumo bajó 20,61%.
Gasoil: las ventas cayeron 9,03%.
Gasoil premium: el consumo bajó un 16,72%.
Consumo de nafta y gasoil en las provincias
El análisis del consumo de combustibles en las 24 provincias y distritos del país muestra que en 16 de ellas la caída fue de dos dígitos porcentuales. La provincia de Buenos Aires lideró el despacho de combustibles con 432.200.000 litros, seguida por Córdoba con 145.289.000 litros, Santa Fe con 112.290.000 litros y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con 95.135.000 litros.
Formosa fue la provincia con la mayor disminución en la venta de combustibles, registrando una caída del 34,13%, mientras que Jujuy tuvo la menor baja, con solo un 2,99%.